viernes, 24 de agosto de 2012

Consejos para dormir durante el embarazo


Durante los meses de gestación, es posible que algunos síntomas del embarazo como las náuseas, la acidez estomacal, las ganas de orinar o tus propiosronquidos te impidan dormir bien. Estos problemas, a veces inevitables, pueden agravarse debido a malos hábitos que estableciste antes de quedar embarazada. Sigue estas pautas para lograr dormir mejor durante el embarazo y después del mismo. 

Cuida lo que comes y bebes... y cuándo lo haces

No fumes ni bebas alcohol: La nicotina y el alcohol no sólo pueden dañar a tu bebé, sino también impedir que duermas bien. 

Reduce tu consumo de cafeína: Disminuye tu consumo de sustancias cafeinadastales como café, té, refrescos (soda) y chocolate (de todas formas, estas sustancias no son seguras en grandes cantidades), y evítalas por completo por la tarde y por la noche. 

Bebe menos en las últimas horas de la tarde y de noche: Aunque es importantetomar mucho líquido durante el embarazo, beber más por la mañana y menos durante las últimas horas de la tarde, y por la noche, te ayudará a no tener que levantarte tantas veces para ir al baño para orinar

Evita las comidas pesadas y muy condimentadas antes de acostarte: Las comidas picantes, como el chile, o las muy ácidas, como las que contienen tomate frito, crudo o hervido, pueden causar agruras e indigestión. También puede provocarte acidez estomacal comer justo antes de acostarte. Es mejor disfrutar de comidas más ligeras y cenar más temprano: deja que transcurran dos o tres horas antes de irte a la cama después de comer, para poder digerir. Verás como duermes mejor. 

Come alimentos simples y fáciles de digerir antes de acostarte para evitar las náuseas: Si te molestan las náuseas (comunes durante el primer trimestre), mantén tu estómago lleno, comiendo con frecuencia alimentos simples como las galletas saladas, sobre todo antes de acostarte. 

Aprende a relajarte 

Duerme siestas: Una siesta de 30 a 60 minutos durante el día hará que estés más alerta, mejora la memoria y en general reduce los síntomas de fatiga durante el embarazo. Un estudio realizado por la Fundación Nacional del Sueño de EE.UU descubrió que más de la mitad de las mujeres embarazadas duerme al menos una siesta durante la semana de trabajo, mientras que el 60 por ciento hace al menos una siesta durante el fin de semana. Pero ten en cuenta que dormir siesta muy tarde o hacer siestas demasiado largas podría alterar tu sueño durante la noche. 

No hagas ejercicio durante las últimas horas de la tarde ni en la noche: Aunque elejercicio es excelente durante el embarazo para tu salud física y mental, asegúrate de hacerlo lo suficientemente temprano para darle a tu cuerpo tiempo para relajarse después de hacer ejercicio. Es bueno terminar al menos de tres a cuatro horas antes de acostarse a dormir. Lee, además, en qué situaciones no debes hacer ningún tipo de ejercicio

Practica técnicas de relajación, como la meditación o la relajación con yoga. Nuestros videos de yoga para embarazadas te pueden ayudar

Deja tus preocupaciones fuera de tu dormitorio: Mantener un cuaderno para notas junto a tu cama puede ayudarte a aliviar ansiedades que surgen a media noche, cuando no puedes dejar de pensar en todas las cosas que necesitas hacer al día siguiente. Pero si anotar tus pensamientos los hace parecer incluso más apremiantes, haz tu lista a más tardar una hora antes de acostarte. 

Practica buenos hábitos para dormir 

Sigue un horario para dormir: Trata de regular tu horario de sueño y vigilia, acostándote y levantándote a la misma hora todos los días. 

Establece una rutina a seguir todas las noches antes de acostarte: Desarrolla una rutina que te relaje durante los 20 o 30 minutos anteriores a irte a dormir, como leer o darte un baño. 

Convierte tu alcoba en un santuario para dormir: Es posible que sientas más calor de lo habitual cuando estás embarazada, así que mantén tu cuarto fresco. También bloquea la luz y el ruido porque podrían despertarte si no estás profundamente dormida. 

Usa tu cama solamente para dormir y pasar tiempo con tu pareja: Si tienes el hábito de pagar tus cuentas pendientes o ver la televisión en la cama, deja de hacerlo. Reserva tu cama para actividades placenteras como dormir, hacer el amoro leer. 

Duerme sobre tu lado izquierdo: Si no lo estás haciendo ya, acostúmbrate a dormir sobre tu lado izquierdo. Esta posición ayuda a que la sangre y los nutrientes fluyan hasta tu bebé y tu útero, y ayuda a tus riñones a eliminar desechos y fluidos. Además, acostumbrarte a dormir en esta posición ahora te ayudará a dormir mejor cuando tu pancita esté más grande. 

Si no puedes dormir... 

Levántate de la cama: Si sigues despierta después de 20 ó 30 minutos, levántate y ve a otra habitación. Escucha música relajante o lee una revista hasta que te sientas soñolienta. 

No te preocupes: Si te despiertas a media noche, ¡no te preocupes! El dormir poco durante el embarazo es totalmente natural. Aunque de momento te pueda parecer imposible dormir toda la noche, con el tiempo llegarás a encontrar una rutina para dormir que te funcione.

viernes, 17 de agosto de 2012

Crecimiento del bebe


¿Cuál es el peso y la talla del bebé al nacer?

Tanto el peso como la talla que el bebé tiene al nacer, dependen de muchos factores. Primero y principal del tamaño de los padres, ya que es una de las características físicas que se heredan, como el color del pelo o de los ojos. Otras veces depende de factores externos al bebé, como por ejemplo una enfermedad materna durante el embarazo, que no permita la llegada de suficiente alimento para el bebé, y en consecuencia el peso es inferior al que por herencia tendría que haber tenido. Por otro lado, también existen enfermedades que pueden provocar un aumento de peso exagerado, como en los casos que aparece una diabetes durante el embarazo.

¿Cuándo se dice que un bebé es de bajo o alto peso?

Se llaman bebés de bajo peso aquellos que nacen con un peso inferior a los 2.500 gramos, y bebés de alto peso a los que nacen con un peso superior a los 4.000 gramos. Siempre depende de los antecedentes familiares específicos en cada caso.

¿Cuándo comienza el bebé a acumular grasa?

El bebé comienza a acumular grasa a partir del quinto mes del embarazo y luego de nacido hasta los 6 meses de vida, momento que alcanza el porcentaje mayor de grasa corporal. Durante el primer año de vida el aumento de peso corporal adecuado nos habla de una alimentación acorde a sus necesidades.

¿Cuánto debe aumentar de peso y crecer mes a mes?

El aumento de peso no es siempre el mismo. En los primeros tres meses el aumento de peso debe ser entre 750 a 900 gramos mensuales. Entre el tercero y sexto mes debe aumentar entre 500 a 600 gramos mensuales. Entre el sexto y noveno mes el aumento de peso es menor, entre 350 y 400 gramos mensuales. Finalmente entre el noveno mes y el año de edad el aumento promedio mensual debe ser entre 250 a 300 gramos. Más abajo encontrarás unas tablas para saber como debe ir creciendo tu bebé durante el primer año de vida.
Debes tener en cuenta que debe permanecer siempre en el mismo percentilo de crecimiento (3, 50 ó 97), esto significa que si tu bebé nació con un peso inferior al promedio (percentilo 3), es normal que su curva de peso se mantenga siempre en ese rango, no es necesario que engorde para pasar a un percentilo superior, ya que el cambio de percentilo indica una dieta inadecuada. Lo mismo se aplica para el percentilo de la talla. Son distintas las tablas para los varones y mujeres, por ello se muestran en cuadros separados.
Si tu bebé no presenta un crecimiento satisfactorio, tu pediatra se encargará de averiguar las causas.
Tanto la medición del peso, como también la talla son controles de rutina que se deben realizar a tu bebé en la consulta habitual que realizas con tu pediatra.

Tablas de crecimiento para niños

Niños

Edad
Peso (g)
Longitud (cm)
Bajo (3)
Medio (50)
Alto (97)
Baja (3)
Media (50)
Alta (97)
36 semanas
1.890
2.950
3.820
44,00
47,40
50,80
37 semanas
2.220
3.110
3.990
45,30
48,60
51,90
38 semanas
2.330
3.230
4.130
46,10
49,80
43,20
39 semanas
2.410
3.330
4.260
47,00
50,30
53,50
40 semanas
2.750
3.510
4.480
46,54
50,16
53,78
1 mes
3.600
4.400
5.700
50,20
54,00
57,60
2 meses
4.390
5.380
6.650
53,25
57,09
60,92
3 meses
5.100
6.200
7.700
56,40
60,40
64,40
4 meses
5.600
6.880
8.450
58,45
62,25
66,45
5 meses
6.100
7.600
9.200
60,60
65,00
68,90
6 meses
6.550
7.990
9.740
62,75
66,74
70,74
7 meses
6.830
8.450
10.380
63,80
68,01
72,10
8 meses
7.180
8.830
10.920
65,11
69,60
73,90
9 meses
7.520
9.240
11.360
66,70
71,11
75,53
10 meses
7.750
9.580
11.750
67,92
72,30
77,02
11 meses
8.000
9.780
12.080
68,98
73,65
78,30
12 meses
8.260
10.150
12.470
70,39
75,01
79,63

Tablas de crecimiento para niñas

Niñas

Edad
Peso (g)
Longitud (cm)
Bajo (3)
Medio (50)
Alto (97)
Baja (3)
Media (50)
Alta (97)
36 semanas
1.930
2.820
3.700
44,00
47,40
50,80
37 semanas
2.120
3.000
3.890
45,30
48,60
51,90
38 semanas
2.260
3.150
4.050
45,70
49,10
52.50
39 semanas
2.360
3.260
4.170
46,40
49,60
52,80
40 semanas
2.600
3.300
4.200
45,60
49,10
52,40
1 mes
3.200
4.300
5.200
49,50
53,10
57,00
2 meses
4.100
5.000
6.100
52,90
56,50
60,00
3 meses
4.800
5.700
6.900
55,70
58,90
62,20
4 meses
5.100
6.200
7.800
58,00
62,00
65,50
5 meses
5.700
7.000
8.500
59,80
63,90
67,50
6 meses
6.100
7.400
9.100
61,60
65,30
68,80
7 meses
6.400
8.000
9.800
63,00
67,00
71,00
8 meses
6.700
8.200
10.200
64,10
68,10
72,60
9 meses
6.800
8.600
10.800
65,40
69,40
73,40
10 meses
7.100
8.900
11.100
66,50
71,00
75,30
11 meses
7.500
9.100
11.600
67,80
72,10
76,90
12 meses
7.700
9.600
11.900
68,90
73,30
77,80

Rubeola durante el embarazo


¿Qué es la rubéola?

La rubéola es una infección viral que usualmente se contagia durante la infancia y tiene baja incidencia de complicaciones en los niños. Pero si el contagio ocurre durante el embarazo, puede afectar seriamente al embrión, especialmente antes de la semana 16.
Por suerte, la gran mayoría de las mujeres padecieron la enfermedad en la infancia y es frecuente que no lo sepan, porque muchas veces es asintomática. Para estar seguros, basta con hacer un análisis de sangre para detectar la presencia de anticuerpos "viejos" llamados inmunoglobulinas G.

¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas de la enfermedad generalmente se presentan a los 12 ó 23 días después del contagio con malestar general, fiebre, ganglios inflamados, dolor articular, enrojecimiento ocular, hinchazón, congestión nasal y a los 5 días aparecerá la erupción característica en la piel que comienza en la cara y que luego se extiende hacia otras partes del cuerpo. También puede ser totalmente asintomática para la madre. Pueden detectarse anticuerpos "nuevos" en la sangre materna una semana después del contagio que se llaman inmunoglobulinas M.
El período más contagioso de la enfermedad es cuando la erupción aparece. De todas formas puede contagiarse desde una semana antes de su aparición hasta una semana después.

¿Qué efectos produce sobre el bebé?

El contagio de rubéola durante el embarazo puede producir el Síndrome de Rubéola Congénita (SRC) en el bebé. Los efectos sobre el embrión se presentan con mayor frecuencia y severidad cuanto más precoz sea el embarazo. El virus ataca al bebé más severamente durante el período embrionario, es decir antes de la semana 8 de gestación, pudiendo provocar ceguera, sordera, retardo mental, alteraciones cardíacas y abdominales. Después de la semana 16 habitualmente provoca alteraciones en la audición y después de la semana 18 bajan los riesgos de afección del bebé considerablemente.

¿Cuál es el tratamiento?

Hasta ahora no existe tratamiento efectivo contra la rubéola ni forma de prevenirla después del contacto con alguien con la enfermedad. Si se ha contraido la enfermedad al comienzo del embarazo se te realizarán estudios para evaluar el estado del bebé. También podrían administrarte inmunoglobulina específica lo más pronto posible luego del contacto, reduciendo de esta forma los riesgos en el bebé, aunque no evitará su contagio.

¿Cómo puede prevenirse?

Lo más importante es que esta enfermedad puede prevenirse mediante una vacuna, administrada a aquellas mujeres que no la padecieron en la infancia, pero está contraindicado un embarazo en los tres meses siguientes a la vacunación. Debes recordar que toda mujer que no haya padecido esta enfermedad debe ser vacunada antes de los 13 años porque no existe tratamiento en caso de confirmarse rubéola durante la gestación.
Si nunca has padecido la enfermedad, ni tampoco has sido vacunada y además los controles de laboratorio en sangre indican que no posees anticuerpos contra el virus de la rubéola, debes recibir la vacuna antes de buscar el embarazo. Es muy importante en este caso evitar el embarazo durante el 1er. mes posterior a la vacunación, utilizando métodos anticonceptivos muy seguros.
Si ya estás embarazada y no eres inmune contra la rubéola lo mejor es evitar el contacto con personas que puedan estar infectadas ya que tampoco puedes recibir la vacuna durante el embarazo. También es aconsejable que te asegures que las personas, y en especial los niños con los que estés en contacto frecuentemente, hayan sido vacunados o bien hayan padecido la enfermedad con anterioridad. No es mala idea que sean vacunados si es que no son inmunes.
Se recomienda vacunarse contra la rubéola después del parto para quedar inmune en embarazos futuros y ya descartar riesgos de contagio.

¿Qué debo hacer si he estado en contacto con alguien con rubéola?

Lo primero que debes hacer es contactar a tu médico. Si eres inmune también deberías consultarlo ya que podría haber un muy bajo riesgo de re-infección, aunque con muy pocas probabilidades de riesgos en el bebé. No es conveniente que vayas a visitarlo ya que podrías contagiar a otras mamás en la sala de espera. El médico sabrá cómo coordinar la visita y te indicará el tratamiento adecuado.
Se te realizará al principio un análisis de sangre que confirme si estás infectada y se repetirá el análisis a las dos semanas y tal vez también a las cuatro semanas. Cualquier resultado que indique un cambio en los anticuerpos desde el primer análisis indicará una infección reciente.